MAS VALE PREVENIR QUE CURAR:

Esta frase tan conocida es uno de los muchos postulados de Sun Tzu en su libro “El Arte de la Guerra”. Si se conoce lo que puede suceder es muy probable que está en nosotros determinar que hacer, tanto en la organización como desde lo personal, cada uno actúa como un general de si mismo puesto que somos responsables de cómo vivimos y nos relacionamos.

La gran reflexión que se ocurre con este planteamiento es sobre lo que se hace para ser conscientes de lo que somos y como actuamos, es lamentable encontrar bien sea por circunstancias del entorno, tanto desde la productividad o la competencia interna se puede resultar actuando de manera robótica e inconsciente, siendo la salida fácil culpar a ese entorno olvidando que este es una construcción establecida por el colectivo del cual hacemos parte.

Es pertinente en el desempeño de las funciones establecer si la mirada es de tarea o de proceso, alguien que está con la mirada desde la tarea solo prioriza el cumplimiento de la orden, en casos, sin indagar el porque o para que de la misma, su función es cumplir en tiempos y resultados con el molde establecido; de lo contrario, una mirada desde los procesos, si bien importa cumplir con los resultados, se genera el espacio para entender por qué y para que y por tanto, establecer rutas de mejora permanente en bien del equipo y la organización.

En el seguimiento al colaborador con visión de tarea, es bueno ir más allá de recriminar su actuar, es prudente antes de establecer juicios analizar que relación de autoridad le genera su jefe inmediato y no extrañarse si aquel es fiel representante de la delegación hacia arriba (aquel de espíritu controlador que revisa hasta la más mínima coma), el desconfiado eterno que termina subvalorando el potencial de su gente (nadie es su espejo) ó el inseguro en la sombra que desea figurar y apropiarse de los resultados de los demás (sabe que no es capaz y no lo reconoce) y así como estos, muchos más donde quien dificulta el paso de la tarea al proceso es el mismo jefe.

En conclusión, ante un colaborador que no de la talla busque primero el líder que tiene y cómo éste establece su relación con el equipo, así tendrá el 70% del diagnóstico de la situación y por ende la ruta a seguir.

Te puedo acompañar en estos procesos.

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